Chile era el ejemplo en la región tanto en lo Económico como en lo Social, pero por largos años ahí también estaba ocurriendo lo que pasa en la mayoría de los nuestros, los beneficios del crecimiento económico, se quedaban en unos pocos, no había una distribución adecuada de las riquezas.
El pueblo y en especial la clase media venían con problemas en su economía familiar, socialmente durante años ningún gobierno en Chile se preocupó por tratar de mejorar la economía, en cifras macros estaban bien, pero no funcionaba el famoso chorreo para el grueso de la población y llego a un punto de quiebre.
Cuando suben los pasajes del Metro, transporte publico emblemático, incluso luego de más de una semana, hay un importante número de la población que está pidiendo la renuncia del Presidente de la República, que incluso públicamente realizo un mea culpa, pidiendo perdón a su pueblo.
En mi opinión será muy difícil revertir el gran descontento de la población, pero debemos advertir que en situaciones como las que hoy vive Chile, lo peligroso es que en ese contexto los violentistas quieren sacar provecho.
La región en general esta movida socialmente hablando y pronto será sumada la demanda económica, hay una especie de contagio de protestas, Ecuador, Bolivia, Argentina, orígenes del problema muy parecidos. Lo que está pasando en Venezuela, cuando analizamos la diferencia en el detonante que llevo a la protesta social, en Chile empezó por un problema económico, en el Perú lo que tenemos es un problema político, que llevó al cierre del Congreso de la República.
Finalmente será importante tomar nota de lo que viene sucediendo en esta parte de América y será muy importante el Plan de Trabajo que presentará públicamente desde el Palacio de Gobierno el Presidente Martín Vizcarra, la lista de demandas es larga pero hay fenómenos que no pueden esperar como el de la Inseguridad Ciudadana.
Quiero hacer aportes que soy un convencido que si funcionaran para empezar a reducir el número y frecuencia de los delitos y sentarán las bases para una adecuada Política de Estado, penas acumulativas, revisión del código penal del niño y adolescentes, refiriéndome específicamente al adolescente de 15 o más años sicario, una mayor sanción de pena privativa a la reincidencia delictiva.
Hay mucho más propuestas, pero estas son importantes: La respuesta del Gobierno tiene que ser Integral y Articulada, además es transversal y no solo son propuestas de efectos, ya paralelamente se debe enfrentar las causas que originan la delincuencia.