¿Racista, yoooo?
Lo sorprendente de la discriminación no es que aún sobreviva en sociedades como la nuestra. Total, países culturalmente más evolucionados andan, en los últimos tiempos, tan infestados de racismo y xenofobia, que los candidatos con más pegada son justamente aquellos que espolean estas taras en ciertos sectores de la población y no son pocos los que han llegado al poder. Si no, miren nomás a Jair Bolsonaro, el hoy presidente de Brasil que, en plena campaña, no tuvo ningún empacho en decir que los negros no sirven ni como reproductores o deslizar, no tan sutilmente, conceptos calcaditos de los viejos manuales de la supremacía blanca del KKK.